13 DE ABRIL DEL 2005 FALLECE EL PINTOR FRONTEREÑO DANIEL MONTUY PONCE.

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Montuy nació en Frontera, Tabasco, México, el 25 de octubre de 1925. Desde pequeño mostró gran interés por la lectura y el dibujo, pero se topó con la oposición de su padre, un empresario macuspanense del jabón, por lo cual decidió autografiar sus primeras obras, como León Montuy y posteriormente sólo con su apellido materno, Montuy.

Ahí conoció al “Poeta de América”, Carlos Pellicer, quien fue su maestro de historia, así como posteriormente su amigo, coleccionista y promotor hizo hincapié a Montuy en sus dotes artísticas.

Así, agregando sus múltiples inquietudes, generó un acervo y propició un estilo creativo, donde convergen el arte, la narración, la denuncia, el colorido, la fuerza expresiva, la técnica, los sentimientos y demás cualidades que resultaron en obras de magnífica manufactura.

Montuy decía: “Yo no pinto para débiles emocionales. La gente se identifica con mi obra, le recuerda preceptos olvidados, la acepta emocionado o la rechaza indignado

Montuy realizó treinta murales durante su vida y dejó bocetos de casi diez más.

De esta forma, a la par de Orozco y Rivera, Montuy fue uno de los tres únicos que expresó su arte en edificios del zócalo, Patrimonio Cultural e Histórico de la Humanidad, ONU 1987

En lo que respecta a su obra de caballete, Montuy realizó aproximadamente trescientas obras, desde gouache, acuarelas, óleos con espátula o con pincel y acrílicos sobre papel o sobre triplay preparado con fibra de vidrio, diversos minerales y pigmentos acrílicos.

Por su trabajo como muralista, Montuy sólo participó en 9 exposiciones colectivas y nueve individuales, tanto en México como en el extranjero. Además dejó más de trescientos bocetos y pre bocetos tanto de sus obras de caballete, como de murales.

Montuy es uno de los artistas más destacados de México: su obra cuenta con un colorido excepcional, una fuerza dramática impresionante y un concepto histórico filosófico de los más elaborados y a la vez asimilables pensamientos humanistas.

En Tabasco, Montuy cristalizó 22 murales.

 

Los últimos diecisiete años de su vida los trabajó en Tabasco y antes de morir ya estaba en pláticas para decorar algunas paredes más de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco, invitado por el sindicato de la misma.

A 14 años de su deceso, el 13 de abril de 2005, para las autoridades de cultura de Tabasco, donde realizó la mayor parte de su obra mural, tanto para las de la ciudad de México, donde exhibió su obra en su mayoría y plasmó siete obras murales, así como para las federales, cuyo deber es resguardar el patrimonio de los mexicanos, debe de ser no solamente una obligación y una tarea urgente, sino también un honor, contribuir con los recursos y patrocinios necesarios a la difusión de su obra mural y de caballete.

De esta manera, enriquecerán uno de los más valiosos legados al patrimonio cultural, histórico y artístico y orgullo de Centla, del pueblo de Tabasco, de los habitantes de la gran urbe, de la nación mexicana y de toda la humanidad.